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Ya está aqui, ya llegó abril

  Ya está aquí, ya llegó abril. Y también el refranero fácil. Ya llegó el horario de verano y casi la primavera y el calor. Qué alegría, mar...

viernes, 10 de marzo de 2023

Adila

  Adila y la vuelta

La posición de las manos, arrugadas y secas, hacía las veces de un trípode al fotógrafo que quiere sacar la foto perfecta, el enfoque exacto. Tenía los dedos llenos de anillos y en las muñecas pulseras. En su rostro, la mirada era directa e inefable, esbozaba un gesto de amabilidad, amor y gratitud. El pelo recogido por un “topí”.

    Adila, madre de ocho hijos, estaba sentada frente al espejo de la alcoba, detrás, de fondo, un telar púrpura. Junto a la cama con dosel, había un baúl con objetos. Las paredes de color beige; las telas de la cama; las alfombras y las cortinas, que junto con el mobiliario; vivo en formas y colores, hacían que el momento estuviera envuelto en halo especial. La habitación transmitía sensaciones placenteras, con encanto.

    Adila se había sentado un instante a descansar del ajetreo de los últimos días. Eran los primeros días de noviembre, ya hacía dos años de la marcha de Nabil. Estas circunstancias la tenían últimamente muy alterada.

    El joven Mohamed, el menor de ellos, de 12 años de edad, acababa de llegar de la tienda de alfombras de la familia. Con la calma y amabilidad que le caracterizaba, besó en la mejilla a su madre. 

    —¡Madre!, Otra vez estás muy pensativa. ¿Estás bien?.¿Lo echas mucho de menos?.

    — Sí, contestó ella. 

    —Tranquila, repuso él— papá estará contento donde quiera que esté, y sabe que nos cuidaremos.

    Siguió sentada, con la mirada quieta, como ausente y divagando entre nostalgias y recuerdos. Muy confundida. No dijo nada más, pero se podía percibir los pensamientos de preocupación. Mohamed, tenía mucha empatía, y la sensibilidad de él, le hacían tener una fuerte conexión con Adila. Intuía con bastante certeza que su madre estaba satisfecha, aunque preocupada y triste. Ella nunca perdía la sonrisa.

    El sol estaba cayendo, y por la ventana entraban los últimos rayos de luz del día. La habitación se oscurecía, pero aún se veían los fuertes colores de las cortinas. 

    Nada sería igual que antes.  La guerra había terminado. Youssouf fue un buen padre, un cariñoso marido y un excelente compañero.

    Meses después. Nabil entró sin llamar, sin hablar, mucho más delgado, sus ojos tristes. Sus lamentos, sus lágrimas y su dolor, eran incontenibles. Se abrazaron con fuerza. ¡¡No pude estar en su adiós, cuanto lo siento!!

—Ella lo miró.


domingo, 10 de octubre de 2021

Rima LII

 LII

Olas gigantes que os rompéis bramando
en las playas desiertas y remotas,
envuelto entre la sábana de espumas,
¡llevadme con vosotras!
Ráfagas de huracán que arrebatáis
del alto bosque las marchitas hojas,
arrastrado en el ciego torbellino,
¡llevadme con vosotras!
Nubes de tempestad que rompe el rayo
y en fuego ornáis las desprendidas orlas,
arrebatado entre la niebla oscura,
¡llevadme con vosotras!
Llevadme por piedad a donde el vértigo
con la razón me arranque la memoria.
¡Por piedad! ¡Tengo miedo de quedarme
con mi dolor a solas!

lunes, 29 de marzo de 2021

¿Te acuerdas? MAS. Algunos suspiros perdidos.

 ¿Te acuerdas Mas, cuándo, el leve roce de nuestras manos nos hacía temblar la mirada?

¿Te acuerdas Mas, cuándo temprano de mañana, una leve sonrisa, una mirada sencilla, nos estremecía?

¿Te acuerdas Mas, cuándo irresistibles compartimos aquella tarde de septiembre?. Parecía, primavera, parecía, … Infinita esencia.


viernes, 23 de octubre de 2020

Poema del Renunciamiento. (José Ángel Buesa)

 RENUNCIAMIENTO


Pasarás por mi vida sin saber que pasaste,
pasaras en silencio por mi amor, y al pasar,
fingiré una sonrisa con un dulce contraste
del dolor de quererte...y jamás lo sabrás.

Soñaré con el nacer virginal de tu frente,
soñaré con tus ojos de esmeralda de mar,
soñaré con tus labios desesperadamente,
soñaré con tus besos... y jamás lo sabrás.

Yo te amaré en silencio, como algo inaccesible,
como un sueño que nunca llegaré a realizar,
y el lejano perfume de mi amor imposible,
rozará tus cabellos … y jamás lo sabrás.

Y si un día una lágrima denuncia mi tormento,
el tormento infinito que te debo ocultar,
te diré sonriente; “no es nada, ha sido el viento”,
me secaré las lágrimas...y jamás lo sabrás.

Puedo tocar tu mano sin que tiemble la mía,
y no volver el rostro para verte pasar.
Puedo apretar mis labios un día tras otro...
y no te puedo olvidar.

Puedo mirar tus ojos y hablar frívolamente,
casi aburridamente sobre un tema vulgar,
Puedo decir tu nombre con voz indiferente...
y no te puedo olvidar.

Puedo estar a tu lado como si no estuviera,
y encontrarte cien veces, casi como al azar.
Puedo verte con otro sin suspirar siquiera...
y no te puedo olvidar.

Ya ves: tú no sospechas este amargo secreto,
más amargo y profundo que el secreto del mar,
ya que puedo dejarte de amar y sin embargo...


NO TE PUEDO OLVIDAR.

miércoles, 14 de octubre de 2020

Tus ojos negros.


Ojos de Córdoba

Tienes ojos negros del azabache de las aceitunas.
Yo diría que tu miradas son flores y explosión de poesía, 
son amapolas en el desierto y en pura armonía.

Y que tus ojos son el inefable aliento de una orquídea brillante y plena de alegría.
Decorados éstos de tu dulce voz, de tu rastro amable, de tu sonrisa limpia 
y hacen perfecta poesía.

Todo a un tiempo es una explosión de que ensordece al poeta, 
catarsis de emoción y sibilina inspiración. 

Pobre poeta, quieto y tembloroso, ruin en la tristeza, atónito observa.
¡Eso que ves, triste poeta, es la primavera en plena armonía!.

Ni Julio Romero, ni Dora con sus artes. 
Ni ningún poeta, ni ninguna sinfonía,
 nunca nadie jamás crearía ni de lejos tanta "María".




viernes, 18 de septiembre de 2020

Podrá nublarse ....


POEMA XCI

 Podrá nublarse el sol eternamente;

Podrá secarse en un instante el mar;

Podrá romperse el eje de la tierra

Como un débil cristal.

¡todo sucederá! Podrá la muerte

Cubrirme con su fúnebre crespón;

Pero jamás en mí podrá apagarse

La llama de tu amor.



La rima del poema XCI de Bécquer es asonante y no todos los versos riman. 


COMENTARIO 

El primer verso parece empezar in media res en el sentido de que empieza directamente con un verso en futuro. Parece como si hubiéramos empezado a escuchar al poeta en mitad de una conversación e interviniera directamente con un verso en futuro, asegurando que una acción concreta sucederá.


     El tercer y cuarto versos son interesantes y encontramos el primer encabalgamiento. En él se lee, parafraseo, que el eje de la tierra se romperá como un débil cristal, cosa que no podrá suceder más adelante con el cristal. Incluso la Muerte interviene en este corto poema de Bécquer y, de nuevo, saldrá derrotada frente a la llama del amor.

domingo, 13 de septiembre de 2020

Ciudad sin Sueño. Federico García Lorca.

Ciudad sin Sueño.

No duerme nadie por el cielo. Nadie, nadie.
Las criaturas de la luna huelen y rondan sus cabañas.
Vendrán las iguanas vivas a morder a los hombres que no sueñan
y el que huye con el corazón roto encontrará por las esquinas
al increíble cocodrilo quieto bajo la tierna protesta de los astros.
No duerme nadie por el mundo. Nadie, nadie.
No duerme nadie.
Hay un muerto en el cementerio más lejano
que se queja tres años
porque tiene un paisaje seco en la rodilla;
y el niño que enterraron esta mañana lloraba tanto
que hubo necesidad de llamar a los perros para que callase.
No es sueño la vida. ¡Alerta! ¡Alerta! ¡Alerta!
Nos caemos por las escaleras para comer la tierra húmeda
o subimos al filo de la nieve con el coro de las dalias muertas.
Pero no hay olvido, ni sueño:
carne viva. Los besos atan las bocas
en una maraña de venas recientes
y al que le duele su dolor le dolerá sin descanso
y al que teme la muerte la llevará sobre sus hombros.
Un día
los caballos vivirán en las tabernas
y las hormigas furiosas
atacarán los cielos amarillos que se refugian en los ojos de las vacas.
Otro día
veremos la resurrección de las mariposas disecadas
y aun andando por un paisaje de esponjas grises y barcos mudos
veremos brillar nuestro anillo y manar rosas de nuestra lengua.
¡Alerta! ¡Alerta! ¡Alerta!
A los que guardan todavía huellas de zarpa y aguacero,
a aquel muchacho que llora porque no sabe la invención del puente
o a aquel muerto que ya no tiene más que la cabeza y un zapato,
hay que llevarlos al muro donde iguanas y sierpes esperan,
donde espera la dentadura del oso,
donde espera la mano momificada del niño
y la piel del camello se eriza con un violento escalofrío azul.
No duerme nadie por el cielo. Nadie, nadie.
No duerme nadie.
¡azotadlo, hijos míos, azotadlo!
Haya un panorama de ojos abiertos
y amargas llagas encendidas.
No duerme nadie por el mundo. Nadie, nadie.
Ya lo he dicho.
No duerme nadie.
Pero si alguien tiene por la noche exceso de musgo en las sienes,
abrid los escotillones para que vea bajo la luna
las copas falsas, el veneno y la calavera de los teatros.
No duerme nadie.
Pero si alguien cierra los ojos,

sábado, 12 de septiembre de 2020

Rima LIV

 

Rima LIV

Yo sé cuál el objeto
de tus suspiros es;
yo conozco la causa de tu dulce
secreta languidez.

¿Te ríes?... Algún día
sabrás, niña, por qué.
Tú acaso lo sospechas,
y yo lo sé.

Yo sé cuándo tú sueñas,
y lo que en sueños ves;
como en un libro, puedo lo que callas
en tu frente leer.

¿Te ríes?... Algún día
sabrás, niña, por qué.
Tú acaso lo sospechas,
y yo lo sé.

Yo sé por qué sonríes
y lloras a la vez;
yo penetro en los senos misteriosos
de tu alma de mujer.

¿Te ríes? ... Algún día
sabrás, niña, por qué;
mientras tú sientes mucho y nada sabes,
yo, que no siento ya, todo lo sé.

viernes, 11 de septiembre de 2020

jueves, 10 de septiembre de 2020

Si alguna vez.

Si alguna vez oliste el olvido.

Si alguna vez oíste el dolor.

Si alguna vez respiraste el sabor…

Si Ella es enorme. Ella es eterna y brillante. 

Ella es tu amor.

Eso, eso es vivir o sufrir. ¡Qué más da! ¡, eso es el presente, el pasado: el dolor!

No te horrorices, deja fluir el tiempo y deja crecer el amor. 

¿Todo llega?, dicen, eso es un error, pues después de la muerte, hay algo de amor



John Gall. Bécquer ga. 


viernes, 4 de septiembre de 2020

Rima XI

RIMA XI


- Yo soy ardiente, yo soy morena,

yo soy el símbolo de la pasión;

de ansia de goces mi alma está llena;

¿a mí me buscas? 

-No es a ti; no


- Mi frente es pálida; mis trenzas de oro

puedo brindarte dichas sin fin;

yo de ternura guardo un tesoro;

¿a mí me llamas? 

-No; no es a ti.


- Yo soy un sueño, un imposible,

vano fantasma de niebla y luz;

soy incorpórea, soy intangible;

no puedo amarte.

-¡ Oh, ven; ven tú!


Gustavo Adolfo Bécquer. 



sábado, 29 de agosto de 2020

Despedida.


 

No quiero.


 

Rima LXVIII



LXVIII

No sé lo que he soñado
en la noche pasada.
Triste, muy triste debió ser el sueño,
pues despierto la angustia me duraba.
Noté al incorporarme
húmeda la almohada,
y por primera vez sentí al notarlo
de un amargo placer henchirse el alma.
Triste cosa es el sueño
que llanto nos arranca,
mas tengo en mi tristeza una alegría...
¡Sé que aún me quedan lágrimas!

lunes, 24 de agosto de 2020

Aún hecho trozos.

Trozos de mi

 Aún hecho trozos su corazón seguía latiendo.
Aun en él yacían esperanzas de luz.
Hoy allí ha soñado. Ha vibrado. 
Hoy ha visto henchirse el alma.
Hoy ha visto el reflejo de la esperanza junto al Ángel caído!!. 
Oh dios!!, reflejos de amor en un charco de lágrimas. 
Oh dios!!, qué feliz es!!, 
...hoy le ha dicho: te quiero.